LOS PLATERO
Celebrando los 30 años del Hebe
Clásico entre los clásicos, lugar emblemático para todos los rockeros madrileños y uno de los imprescindibles en las noches de Vallekas, el Hebe lleva ya 30 años siendo centro de reunión de artistas y público: haya o no concierto, es fácil encontrarte por allí con cualquier músico (fue precisamente aquí donde por primera vez saludé a Fito y a Iñaki, un rato después de haber estado viéndoles tocar en Canciller – otro de los locales míticos del rock madrileño, por todos recordado). Y es que para cualquier rockero que visita el Foro es una cita casi obligada pasarse por aquí, por algo será…
Contaba Fito que al acabar la mili se vino a Vallekas a ver a unos colegas; llegó al Hebe, y ya no se movió de allí en dos semanas. Vamos, que si le hubieran dado curro lo mismo podría haberse quedado de camarero allí para toda la vida… No fue así (sin duda se perdió un gran camarero), y Fito acabó volviendo a Bilbao y formando lo que sería uno de los mejores grupos de rock que ha visto este país: PLATERO Y TU. Casualmente, entre los eventos organizados para festejar esta treintena había un concierto de LOS PLATERO, la banda de versiones de los bilbaínos que desde hace un par de años hacen funcionar entre miembros de GARAJE JACK y SALIDA NULA, dos bandas con gran solera dentro del rock madrileño, capaces de mantener una incesante actividad a través de estos y otros proyectos paralelos.
Hace ya unos cuantos años que Platero y Tú dieron por terminada esa etapa, los suficientes para que les echemos de menos; y también los suficientes para que haya una nueva generación que sólo les conoce por sus discos, ya que no llegó a tiempo de verles sobre un escenario. Por eso hay que agradecer que alguien se haya lanzado a recuperar esas canciones sobre un escenario, enchufándolas de nuevo a la vitalidad que nunca perdieron; porque esos temas siguen ahí, criticando actitudes (“No hierve tu sangre”, “A un tipo listo”), buscando diversión (“Hay poco Rock’n’Roll”, “Voy a acabar borracho”), gritando inconformismo (“Rompe los cristales”, “Ya no existe la vida”) o, sencillamente, hablando de personajes (“Mari Madalenas”, “Ramón”) y situaciones (“El roce de tu cuerpo”, “Tras la barra”) tan singulares como cotidianas y reconocibles para cualquiera que los escucha. Esas letras sin duda tienen algo especial: no sólo es lo que cuentan, es más bien como lo cuentan, de forma sencilla pero contundente y clara, que te llega.
Así que no es extraño que haya gente empeñada en que esos temas puedan seguir disfrutándose en un concierto, y eso lo hacen posible Los Platero. No se conforman con ir clavando el repertorio, sino que lo hacen de corazón y suenan de forma que te hacen creer que tienes delante a los autores de esos himnos. Y no es que la voz de Sergio sea igual que la de Fito, ni que Oscar o Hatxazo sean unas bestias pardas como el Uoho (aunque nivel instrumental desde luego no les falta), no se trata de eso: lo que importa, el sentimiento, sí es el mismo porque se han – y nos hemos – criado cantando y viviendo esto mismo. Garage Jack como banda han demostrado ser todoterrenos del rock (y de lo que se les ponga) capaces tanto de hacer grandes discos propios como de retomar clásicos de otros en diversos homenajes (Stones, Zeppelin…), y aquí con el cambio en la voz y el refuerzo a la guitarra de sus “primos” de Salida Nula cobran nuevos bríos, sobre todo en temas como “Un ABC sin letras”, en que la vena del ska se les desborda, especialmente a un Sergio liberado de su habitual guitarra para centrarse solo en enganchar con la peña, que le acompaña feliz cantando hasta quedarse sin voz. No son los de verdad, pero son igual de auténticos… y te lo hacen pasar igual de bien.
Amigos del Hebe, tenemos que felicitaros y daros las gracias por todos estos años, y suscribo totalmente la sentencia que habéis escogido para resumir esta andadura, porque no se me ocurre ninguna mejor: ¡QUÉ BIEN LO HEMOS PASAO! Que siga siendo así, y que nos podamos ver muchos años más.