JORN – Life on Death Road

Duodécimo álbum de estudio del portentoso vocalista noruego Jorn Lande, incluidos los tres discos de versiones que también ha publicado, una de sus especialidades, esta vez con temas nuevos en los que el esfuerzo compositivo ha producido un heavy metal estándar que, si somos puñeteros, suena al Whitesnake de la nueva etapa, pero con la voz como debería sonar. La verdad es que tiene momentos que canta exactamente como David Coverdale, pero bien, no como David Coverdale (risas).

Por lo demás, con una banda ad hoc proporcionada por Frontiers SRL, con los colaboradores habituales del sello Alessandro del Vecchio (producción y teclados), más Francesco Iovino (batería), Mat sinner (bajo) y brillando por encima de todos ellos el excelentísimo guitarra Alex Beyrodt, todos ellos de Primal Fear.

Esto suena increíble, y encima con esa pedazo de voz no te hace falta más. La docena de temas del disco, en general por encima de los cinco minutos, tienen ritmos guapos, solos formidables y unas líneas vocales, dobladas a menudo por el mismo Lande, del todo impecables: Life on Death Road, que abre el disco con sus más de siete minutos de duración, es la mejor declaración de intenciones. Otra perla: Fire to the sun. Este tío es un monstruo de todas, todas.